Regalos de dos puntos
Lo que a priori se intuía como un buen resultado, un empate, al término de los noventa minutos tuvo sabor amargo. Los regalos de Iraizoz y de Amorebieta, al no acertar con la meta contraria en el último suspiro del partido, dejó a los aficionados rojiblancos sin saber qué hacer, ni como asimilar los dos puntos perdidos en el Sardinero. Porque ayer no se ganó un punto. Se perdieron dos.El partido fue pobre en cuanto a fútbol y el Racing apenas inquietó la meta rojiblanca. Incluso en el gol del empate, el centro de Colsa parecía tener menos peligro que un caracol en una carrera de los 100m.
Lo más positivo en el día de ayer fue la eficaz labor de la defensa rojiblanca y la sensación de equipo bien armado y sólido que se dio. Esta es la línea a seguir. Cuando Llorente no puede tirar del equipo es importante que, como ayer, el equipo muestre solidez atrás. Todos los días no se puede ser estrella...
Orain eta beti AUPA ATHLETIC
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