Crisis en la Casa Blanca

La vida puede parecer corta y eterna a la vez. Por eso hay que saber vivirla, aunque no resulte nada fácil. Sólo pasaremos una vez por este mundo y no podemos caer en el aburrimiento o en la desesperación. Afortunadamente, tenemos a nuestro alcance todo lo necesario para ser felices. Aprovechemos nuestro status social y ayudemos a los necesitados para ser realmente útiles. ¡Que nos recuerden por nuestros logros y no por nuestros fracasos!
En cuanto al posible resultado del partido, es una quimera atreverse a pronosticar cual de los dos equipos puede llevarse el gato al agua, aunque en esta ocasión parece que después de varios años de intentonas, los rookies pueden dar un buen meneo a los de segundo año. Los Mayo, Rudy, Beasley, Rose u Oden parecen poder comerse en teoría a los Brooks, Chandler, Al Hordfor, Scola o Durant.
Quién me iba a decir a mi a principio de temporada que ibamos a estar en esta situación. Probablemente más de uno, pero le hubiera tachado de inconsciente o de iluso. Sin embargo, después de varios meses de competición, nos encontramos en una holgada posición en el campeonato liguero y clasificados para las semifinales de la Copa del Rey, tras haber dejado en la cuneta a tres primeras. ¡Qué bonito suena por Dios!
Tras un paupérrimo comienzo de liga el equipo se ha rehecho y ha empezado a demostrar algo que hacía mucho tiempo que no se veía por Bilbao. La raza unida a la calidad. Ha habido épocas en las que andábamos sobrados de una de las dos, pero cojeábamos en la otra. Por fin, parece que tenemos un equipo que ha sabido aunar ambos términos. Si a jugadores de la talla de Iraola, Orbaiz o Llorente les unimos futbolistas que se comen la hierba como J. Martínez o Amorebieta, el resultado es un Athletic semifinalista de Copa y que por fin vuelve a ilusionar!!!
Es la tercera vez en siete años que vamos a disputar unas semifinales del torneo del K.O y esta vez no se nos puede escapar. Que se cumpla el dicho de que a la tercera va la vencida y todos podamos cantar aquello de: ¡¡¡Vaya, vaya, vaya, nos vamos a Mestalla!!!
El empate a uno final se antoja como bueno para la vuelta y hace soñar a los leones con los cuartos de final. Si se hacen bien las cosas en San Mamés en el parttido de vuelta, Sporting o Valladolid será el próximo rival en la carrera hacia Mestalla. En la carrera hacia una nueva final de Copa. Qúé bien suena...
Cuando el partido estaba más atascado y el Espanyol empezaba a ilusionarse con la posibilidad de llevarse los tres puntos para Barcelona apareció Iraola. Controló con el pecho el balón y sin dejarlo caer lo colocó en las mallas de Kameni con una sublime vaselina. En San Mamés no se recordaba un gol parecido desde la época de Urzaiz y su chilena al Oviedo.
El empate a uno final no dejó contento a nadie, pero por lo menos sirvió para que los leones continuasen con su buena racha y que el Espanyol, un posible rival directo por la permanencia, no se llevase los tres puntos de la Catedral.